lunes, 19 de noviembre de 2018

Soy un hipócrita. No, no lo soy. Pero quizás debería dejarme de aconsejar a Hoai o de tratar de proyectar en él lo que aprendo y luego no llevo a la práctica. No sé qué va a pasar mañana pero me parece que me sigue importando más Son que los resultados y ahora pienso que no, que solo uso a Son porque no quiero asustarme aun más por los resultados. Me siento muy solo y no soy capaz de acompañarme porque no quiero estar aquí conmigo. No sé parar en la espiral. Me ha parecido bastante haber parado a Álvaro en el sexo oral cuando lo que debería haber hecho es no haber estado disponible para él esta tarde. Que científicamente sea imposible ya no me vale, porque también lo pensaba cuando lo hice con Juan o con quien fuera y ahora estoy recogiendo mierda, y el lodo me ha sepultado por completo. Sí, me doy pena, y necesito que me rescaten porque estoy cansado de todo esto. Quiero quedarme en la cama y que me den de comer y olvidarme de todo. Necesito volver a Preescolar. Todo era sencillo entonces, o al menos no lo recuerdo como doloroso, aun no había comenzado a tener miedo del daño que la gente me hace gratuitamente. Del daño que dejo que me hagan gratuitamente.